Cuando pensamos en Subaru, rápidamente se nos viene a la cabeza el Impreza que tantas veces hemos visto en los Rallys por la tele. Aquellos Subaru Impreza azul y amarillo que pilotaba Colin McRae o el mismo Carlos Sáinz a mediados de los 90, con el famoso cuando atropello de la cabra que le impidió conseguir el título mundial.
El Impreza ha sido la imagen de la marca coreana en Europa, su emblema, el modelo que ha dado a conocer a la marca gracias al mundo de la competición. Ahora Subaru presenta el nuevo Impreza WRX STI, con carrocería sedán, un coche que bien podría utilizarse en un circuito, dada sus características de competición y la mecánica que presentan. Como señalan desde Km 77.com, se trata de un motor gasolina de 2’5 litros boxer que desarrolla una potencia de 301 caballos con el que acelera de 0 a 100 en 5’2 segundos y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h. El motor va asociado a una caja manual de seis relaciones.
Cuenta, además, con un dispositivo llamado “SI-Dvrive” que permite al conductor elegir entre tres funciones diferentes de conducción, desde una más relajada a otra más deportiva. Está equipado con un amplio abanico de ayudas a la conducción entre las que destacan el sistema de control de estabilidad “VDC” con dos tipos de funcionamiento, uno normal y otro que entra en acción más tarde e interviene únicamente con el sistema de frenos.
En cuanto al precio del coche, como apuntó Guillermo Pérez Medina, jefe de prensa de Subaru en España, en el programa Marca Motor de Radio Marca, no es desorbitado, dada sus características. 42.950 euros son necesarios para disfrutar de 300 caballos y unas prestaciones de infarto.
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